Aprendizaje de Valor

"APRENDIZAJE DE VALOR"

Cada día es más necesaria la formación en las empresas para lograr adaptarse a los cambios en la economía y para seguir siendo competitivas. Cada vez debemos formarnos más y en menos tiempo. Por ello, la formación tradicional ya no es suficiente para hacer frente a las necesidades de las empresas, por no hablar de los elevados costes que supone su impartición.

La fórmula basada en las TIC para  el aprendizaje del empleado es lo que llamamos e-learning. Este sistema racionaliza el coste de la formación en las empresas al requerir una infraestructura muy inferior a la de la formación tradicional.  El e-learning crece en España a ritmos anuales superiores al 20% con un volumen cercano a los 50 millones de euros, un 12% del total dedicado a formación en las empresas. En los últimos tiempos, las empresas que aún se resistían al cambio de la formación tradicional hacia el e-learning por pura comodidad, están ahora revisando sus planes de formación hacia  modelos virtuales o "blended" (modelos mixtos de formación presencia, e-learning y comunidades de prácticas), mucho más eficientes, que les permiten reducir costes en más de un 20% sin perder calidad.

El e-learning puede presentarse en muchas modalidades: un juego de ordenador debidamente configurado puede servir para mejorar el servicio de atención al cliente de una empresa. Un master universitario MBA puede adaptarse a un formato virtual  e incorporar prácticas y ejemplos relacionados con una empresa o sector. Las buenas prácticas recopiladas en una empresa  a través de una comunidad  de prácticas, pueden convertirse en píldoras de conocimiento que los empleados visualizarán a través de su teléfono móvil (...). Las comunidades de prácticas son entornos virtuales con herramientas web 2.0 (foros, chats, blogs, wikis, agendas, ...) en las que grupos de personas comparten una práctica común, retos y problemas. Dichos espacios, debidamente dinamizados por expertos, permiten extraer conocimientos y estrategias de gran valor de los empleados más experimentados.

La elección del formato debe ir en función de los objetivos de aprendizaje que perseguimos y del público (alumnos) al que nos dirigimos. Si los formatos de formación virtual son diversos, también lo son las plataformas desde las cuales se imparte o gestiona la formación. El objetivo primordial es asegurarse que dichas plataformas y formatos de formación se adaptan perfectamente a la estrategia de nuestra empresa y no a la inversa.

La formación debe aportar valor a nuestro negocio, incidiendo directamente en el incremento de nuestras ventas, en una reducción de nuestros costes directos de formación y en lograr que cada día seamos más eficientes. Para ello es necesario detectar las oportunidades de aprendizaje de valor para nuestra empresa y establecer los indicadores que nos permitan evaluar su evolución. La formación que no aporta valor en una empresa carece de sentido. Es lo que llamamos "Value Learning".

Francesc Fàbregas, Director general de GEC, S.A.